Los invito a que pongan el ojo en el detalle. Montar un workflow es un paso indispensable en marketing automation. Aunque es una tarea que a primera vista parece se puede hacer mecánicamente, no es así. No todos los workflows son iguales, porque los objetivos de su montaje no son siempre los mismos. Sin embargo, en este artículo te desglosaré algunos pasos esenciales y las partes que debes incluir en tu workflow de manera sencilla y efectiva.
Los primeros pasos parecen muy obvios, pero son esenciales:
Paso 1: Define objetivos
¿Quieres aumentar las conversiones, nutrir leads, o mejorar la retención de clientes? Define tus objetivos claramente para que guíen todo el proceso de automatización.
Paso 2: Identifica tu audiencia
Con tus objetivos en mente, segmenta tu audiencia. Agrupa a tus contactos en categorías según la comunicación que le quieres transmitir o las acciones que quieren que hagan.
Paso 3: Selecciona un software de automatización. ¿La plataforma qué escogiste responde a tus necesidades y presupuesto?
Paso 4: Crea Contenido de valor.
El contenido es una de las válvulas de tu corazón-objetivos y uno de los caminos para que tu audiencia resuene con tu mensaje. Toda comunicación que elaboras debe responder a tu lenguaje marca, responder las necesidades de tu cliente o prospecto según el segmento en que lo hayas agrupado, ser claro y directo y, sobre todas las cosas, no perder el toque humano.
Paso 5: Diseña el flujo de trabajo
Aquí es donde la magia sucede. Recomendamos, pintar el flujo y los posibles escenarios en herramientas como Miro.com antes de montar el flujo en tu software de automatización, esto te permite mirar un mapa completo de acciones, posibles stoppers, horas y fechas de envío, bifurcaciones en el journey, etc.
Una de las partes clave del workflow que estás montando es definir los puntos de contacto como los mail de bienvenida, envío de recordatorios a los usuarios que no finalizaron acciones o seguimientos a los clientes después de realizar las acciones deseadas.
Otro punto importante es establecer las reglas para activar estos mensajes. Aquí es importante la segmentación dinámica, es decir segmentar los contactos según su comportamiento o acciones como clic en enlaces.
Por ejemplo, envíamos a toda la BD el correo de bienvenida, pero diez contactos dieron click a descargar el e-book y otros diez dieron click al enlace de calendario de reuniones, claramente no podemos seguir enviando la misma comunicación a estos dos grupos. Así que, establecemos la regla de que a los que pidieron la descarga del material, le enviamos un segundo correo con el material y contenido extra. A los que pidieron una reunión, le enviamos posibles fechas y otro contenido.
Dentro del workflow también puedes establecer la regla de clasificación de leads. Clasificamos a los contactos según su interacción con tu contenido, lo que ayuda a tu equipo de ventas a centrarse en los leads más prometedores. No es lo mismo enviarle nuestra propuesta de servicios a un contacto que no ha abierto ningún correo, que enviarla a un contacto que ha interactuado con todas nuestras comunicaciones.
Paso 6: Prueba y ajusta
Ningún flujo de automatización es perfecto desde el principio. Realiza pruebas para verificar que todo funcione correctamente y observa los resultados. A medida que obtengas datos, usa esa data para analizar y evaluar el rendimiento del workflow y realizar ajustes para aumentar la eficacia.
Paso 7: Escucha a tu audiencia
Escucha las respuestas y el feedback de tus contactos y ajústate en consecuencia.
Conclusión
Montar un flujo de trabajo o workflow no es una tarea mecánica como parece. Es indispensable un ojo en el detalle, la apertura al error, optimización y ajuste. Con estas partes clave en su lugar y una actitud de experimentación, estaremos en camino a potenciar nuestras estrategias. ¡Buena suerte en tu viaje de marketing automation!
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chrisnel.sanchez@mandaladigitals.com
Te dejo también el link de mi podcast para que lo escuches y compartamos ideas:
